¿Malos Tiempos para la Lírica? Puede...

Golpes Bajos
ya nos advirtió de ello con esa fabulosa canción que siempre formará parte de nuestra mejor herencia musical. También el poeta Bertolt Brecht, cuyo lúcido poema Schlechte Zeit für Lyrik (Malos Tiempos para la Lírica) reflexionaba -cien años atrás- sobre cómo él y su entorno vivían cada vez más acorralados...
Pero ¿y hoy? ¿Acaso no estamos ahora -igual que entonces- cada vez más cercados en demasiados aspectos? Y con respecto a la Literatura ¿realmente nos quieren hacer creer que su capacidad de nombrar lo inombrable del modo más conciso resulta innecesaria? ¿O no resulta escandaloso cómo se margina a la Lírica en particular, cuya incisiva sagacidad puede despertar la capacidad crítica de quién la lee?
Bajo el endeble argumento de que la lírica no merece ser fomentada porque no produce suficientes lectores..., se contrapone la evidencia de que precisamente la Lírica Clásica, incluso en esta mercantilizada civilización, sigue siendo capaz de remover nuestras conciencias y de educar nuestra reflexión hasta el punto de llevarnos a (re)plantear algunos de nuestros enquistados comportamientos. De modo que, por mucho que quieran silenciar la importancia del Arte, de la Cultura, de la Filosofía, de la Literatura en general o de la lírica en particular... ¡No deberíamos olvidar cuánto pueden apuntalar nuestra sociedad!
Y ésta es la razón por la que existe este blog: para reivindicar su importancia y contribuir a su divulgación.

Miriam Dauster (poetryandmore)


domingo, 29 de julio de 2012

Vuestro polvo está oscureciendo las estrellas

Nadie tiene derecho a obligar al sufrimiento
Así empieza la carta abierta del neurocirujano infantil Javier Esparza al ministro de Justicia A. Ruiz Gallardón del 25 de julio de 2012 en EL PAÍS en relación a la intención de éste de modificar la Ley del aborto. En esta carta abierta, de página entera, explica muy clara y eficazmente que en los últimos 28 años de su vida profesional dedicados exclusivamente a la neurocirugía infantil ha tenido que tratar a muchos cientos de niños que padecían malformaciones congénitas del sistema nervioso y que, desgraciadamente, ha sido testigo del tremendo sufrimiento que causan estas anomalías a las familias, pero, sobre todo, a los propios niños. Y dice:
"Quiero suponer, pues no puedo entenderlo de otra manera, que la intención del ministro de Justicia Alberto Ruiz Gallardón es producto del desconocimiento de esta realidad y de estas enfermedades." 
Y le detalla a él y a todos los que con su ignorancia y egoísmo sólo consiguen que las cosas cada vez vayan peor, las terribles consecuencias para el que tiene que padecer la enfermedad, el dolor y sufrimiento para la familia o el tremendo gasto y esfuerzo sanitario... cuando, además, ninguno de estos niños no llega a cumplir ni la mayoría de edad.
Ojalá la carta de Esparza:
sociedad.elpais.com/sociedad/2012/07/24/actualidad/1343153808_906956.html
haga más justo al Sr. Ministro de Justicia (y, de paso, a todos aquellos que quieren convencernos de que el progreso, los derechos, las libertades -muchas de ellas tan arduamente conquistadas- tienen algo que ver con la fe, con el fanatismo...
Por lo que, quisiera dedicar este sagaz y esperanzador poema de Mark Strand (Canadá, 1934) a todos los que sí siguen esforzándose, incluso individualmente, para que este sea un mundo más justo, que siguen luchando en defensa de la igualdad sin hipocresías:
Lo que voy a contar sucedió hace años.
Yo había alquilado una casa junto al mar.
Cada noche me sentaba en la terraza 
y anhelaba alguna oleada de sentimiento,
una encendida corriente de sonido 
que me alejara de todo lo que había conocido.

Pero una noche subí a la colina detrás de la casa 
y allá abajo vi un camino de tierra donde me sorprendió descubrir
largas hileras de gente perdiéndose en la distancia arrastrando los pies.

Su respirar pesado y su tos probablemente 
eran causados por la nube de polvo
que había levantado su marcha.
"¿Quiénes sois  y por qué está sucediendo esto?",
le pregunté a uno de ellos.
"Somos creyentes y debemos seguir caminando  -y luego añadió-,
nuestro trabajo es importante y tiene que ver con el ser".
 "Pero todo vuestro polvo está oscureciendo las estrellas", le dije.
"No, no, dijo, "sólo estamos de paso, las estrellas volverán".
 (Casi invisible, 2012. Colección Visor de Poesía (Trad. de Julio Trujillo)

Para todos los que queréis firmar contra esta nueva Ley del Aborto:
www.change.org/es/peticiones/pide-al-ministro-de-justicia-que-no-reforme-la-ley-del-aborto?utm_source=action_alert&utm_medium=email&utm_campaign=8278&alert_id=biSPdfUYYw_ESjYJrSSNi 
(poetryandmore)