Chicos, me tomo un descanso... hasta septiembre
Volveré después del verano para seguir reivindicando la lírica clásica con todos esos poetas más o menos conocidos, más o menos celebrados o más o menos comprendidos... pues, como algunos de los que nombraba Roy Fuller en "Enero de 1940", se diría, perdieron a su ángel de la guarda por el camino... y a pesar de todo, consiguieron que sus voces nos resulten, aún hoy, imprescindibles...
Swift sentía pintadas en la cabeza.
Johnson, agonizante en su lecho,
Se hizo una incisión para la hidropesia.
Blake vio una pulga y un elfo.
Tennyson podía oír el chillido
De un murciélago. Pope era un espanto.
Emily Dickinson se quedó encerrada toda una década.
El agua llenó el vientre de Hart Crane y Shelley.
Coleridge era toxicómano.
Southwell murió colgado.
Byron tenía un blanco pie bola.
A Smart y Cowper hubo
Que internarlos. Lawrence era inaguantable.
Keats era casi un enano.
Donne vivió en su mortaja,
Shakespeare, envuelto en una nube...
Vieron muy bien a la muerte cuando venía.
Como un cangrejo, sombría y maciza...
A ellos les envidio no sólo sus dotes
Así como su fértil falta de equilibrio
Si no también la apariencia de opción
En sus tristes voces fatídicas.
No vayáis más rápido
de lo que puede volar vuestro ángel de la guarda...
Hasta entonces, me podéis localizar en: www.formspring.me/poetrysblog
(poetryandmore)
Felices vacaciones y como buenos lectores esperaremos impacientes tu vuelta y la de la buena literatura. Aprovecha para leer el último libro de poemas de GªMontero editado por Visor.
ResponderEliminarHasta Septiembre y muchas gracias por estos buenos momentos que me das con tu blog.
ferni